Aloe Vera: la reina de las plantas medicinales

Aloe Vera: la reina de las plantas medicinales

Hoy en día, a casi todos nos suena el nombre de la planta "Aloe Vera". Se la considera la reina de las plantas medicinales y actualmente hay una gran cantidad de productos que la contienen. Por lo tanto, no sólo es la planta medicinal más conocida en el mundo, sino también la que tiene mayor fama y que se utiliza desde tiempos inmemoriales.

El Aloe Vera es conocido desde hace miles de años. Existen pruebas de que hace 6000 años los egipcios ya lo utilizaban. Hace 4000 años, los sumerios también eran conocedores de sus propiedades curativas. Desde entonces, el Aloe Vera aparece una y otra vez en textos que han traspasado generaciones.

Sin embargo, el origen de esta planta es incierto. Probablemente provenga de la península arábiga, pero no es seguro. Hoy en día podemos encontrarla en todas las regiones tropicales o subtropicales del mundo, donde también se cultiva. En muchas partes del mundo, como en la zona del Mediterráneo o de la India, esta planta ya se ha aclimatado completamente.

El Aloe Vera crece directamente sobre el suelo. No tiene raíces y se compone básicamente de hojas, las cuales pueden llegar a medir 50 cm de largo y 7 cm de ancho. Están recubiertas por una especie de corteza y están dentadas solo en el margen, lo que la hace bastante similar al cactus, pero que en realidad por su aspecto se parece más al agave. No obstante, el Aloe Vera no pertenece a la especie de los cactus o del agave, sino que pertenece a la familia de las liliáceas.

El Aloe Vera fabrica sus propias sustancias nutritivas y las almacena, junto con el agua necesaria para vivir, en el interior de sus hojas, donde también se encuentran los principios activos de la planta en forma de gel.

El gel del Aloe Vera contiene más de 200 principios activos diferentes. El más destacable es el polisacárido acemannan. En los humanos se almacena en la membrana celular y fortalece el organismo, ya que tiene un efecto muy positivo sobre el sistema inmunitario. El cuerpo fabrica esta sustancia hasta la pubertad y a partir de entonces debe adquirirse a través de la alimentación. Además, las hojas contienen vitaminas, aminoácidos, elementos minerales, enzimas...

El gel, que tiene una consistencia viscosa, se absorbe rápidamente por la piel. Ya en la antigüedad se utilizaba para curar heridas y quemaduras. Su contenido es especialmente beneficioso para la piel, razón por la cual el Aloe Vera es un ingrediente muy recurrido en los productos cosméticos.

La planta también es apta para tomar. De esta manera, protege el estómago y puede ayudar con los problemas de estreñimiento. Sin embargo, ingerir altas dosis puede causar graves efectos secundarios, por lo que se recomienda siempre consultar a un médico antes de ingerirla.

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